Se trata de una obra maestra de casi seis años de curación artesanal que rinde tributo al tiempo, la excelencia y la sofisticación en cada bocado.
Reserva Ibérica (con varios establecimientos en Barcelona y presencia en aeropuertos nacionales y en países como Japón, Austria o Hong Kong) vuelve a elevar la experiencia gourmet con su jamón de bellota “XO 70 meses”, una denominación inspirada en la nomenclatura de los grandes coñacs, Extra Old, que rinde homenaje al valor del tiempo y la maduración perfecta. Fruto de casi seis años de curación natural y artesanal, esta pieza se presenta como una auténtica obra maestra, que encarna el valor del tiempo, la dedicación y la búsqueda incansable de la perfección. Una pieza exclusiva, destinada a conquistar las mesas más exigentes. Una joya reservada para quienes aprecian la excelencia y la sofisticación en cada bocado.
“Cada pata requiere un tiempo, dependiendo de su morfología, su peso, su origen, las condiciones de la bellota durante la etapa de engorde del cerdo, la climatología durante su maduración,… Se trata de dar un trato casi individualizado a cada pieza para conseguir el mejor jamón posible. Dedico mucho tiempo tanto a buscar la materia prima más selecta como a acompañar su proceso de curación para asegurar la máxima calidad», explica Manuel López, su propietario, con una larga trayectoria como afinador de jamones.
Donde el tiempo se convierte en sabor
El jamón ibérico de bellota es sinónimo de alta gastronomía, y la versión de “XO 70meses” de Reserva Ibérica (1,200 euros la pieza de diez kilos) representa la cúspide de esta tradición. Tras un largo y meticuloso proceso de curación natural en el silencio de bodegas selectas, esta joya gastronómica alcanza una complejidad de sabores inigualable, con una textura que se derrite en la boca y un perfil aromático profundo, digno de las mesas más exclusivas. Su calidad, así como el elevado porcentaje de ácido oleico—reconocido por sus propiedades saludables—, son atributos característicos de esta pieza excepcional.
El ácido oleico, resultado de la dieta rica en bellotas de los cerdos criados en la dehesa, aporta suavidad y elegancia al jamón, siendo clave para lograr la textura marmoleada y el sabor equilibrado que lo distinguen. Solo unas pocas piezas al año alcanzan la curación de 70 meses, convirtiendo a este jamón en un producto de exclusividad extraordinaria y prácticamente inigualable en el mercado. Su escasez refleja la dedicación y el esmero puestos en cada etapa del proceso, elevándolo a la categoría de auténtica joya gastronómica.
Reserva Ibérica, The Kitchen, un refugio de sabores
Ubicado en el corazón de Barcelona, Reserva Ibérica The Kitchen (Aragó, 258. Barcelona) ofrece a los comensales la oportunidad de disfrutar del cerdo ibérico en un entorno que refleja la autenticidad y la pasión de la marca. Bajo la dirección de Manuel López, los visitantes pueden degustar tanto el jamón de bellota de larga duración como cortes selectos de las carnes de montanera, en una experiencia gastronómica que combina sabor y tradición. Cuentan con otro restaurante en Sant Cugat del Vallés.
Los mejores jamones ibéricos
Desde hace más de 35 años, la familia de Manuel López regenta una reconocida parada en La Boquería dedicada a la charcutería y a la selección de los mejores ibéricos. Con 14 años, Manuel ya cortaba jamones y por sus manos habrán pasado miles de piezas de cerdo ibérico de pura raza. A punto de trasladarse a trabajar a China para una empresa industrial, en el 2006 Manuel decidió apostar por la tradición y lo dejó todo para fundar Reserva Ibérica. Su objetivo: seleccionar los mejores jamones ibéricos disponibles cada año en las dehesas del sureste de la Península para ofrecerlos en sus propios establecimientos en Barcelona.





