La nueva bodega se erige como un símbolo del compromiso de Bodegas La Horra con el territorio y la excelencia. El diseño arquitectónico combina eficiencia energética, gravedad natural y armonía con el paisaje. Carme Pinós, Premio Nacional de Arquitectura, y su estudio han trabajado junto a la propiedad, Vértice21 Ingeniería y la constructora Inexo, en el proyecto. La inversión en la obra ha sido de 9,5 millones.
Bodegas La Horra, situada en Ribera del Duero, ha inaugurado su nueva bodega, proyectada por Carme Pinós, Premio Nacional de Arquitectura, bajo criterios de sostenibilidad, integrada en el paisaje e inspirada en la arquitectura tradicional de las bodegas de la zona.
La consolidación del proyecto de La Horra
La nueva bodega supone la consolidación del proyecto de Bodegas La Horra, que empezó su andadura en 2009. En una primera fase, se levantó la nave de elaboración para vinificar las primeras añadas de Corimbo y Corimbo I. En la segunda, finalizada en 2015, se construyó la zona de crianza y el botellero. En 2023, se inició la tercera fase, junto con el Estudio Carme Pinós. En la inauguración han estado presentes Mario Rotllant, presidente de Grupo Roda; Agustín Santolaya, director general de Grupo Roda; Pedro y Pablo Balbás, socios y viticultores de La Horra y Roa de Duero; Carme Pinós, arquitecta, y Eduardo Orozco, socio de Vértice21 y Sergio Rello, director general de la constructora Inexo, que han colaborado con el Estudio Carme Pinós en el desarrollo del proyecto.
El lugar perfecto para la uva Tempranillo
Grupo Roda, fundadores de Bodegas Roda, la bodega del Barrio de la Estación de Haro (DOCa Rioja), tras una exhaustiva búsqueda del mejor territorio para la uva Tempranillo, apostó por la zona y el territorio de la Ribera del Duero. Así, encontró en los viñedos de La Horra (Burgos) el lugar perfecto para realizar su proyecto.
En su nueva bodega, La Horra plasma toda su filosofía de preservación y respeto absoluto de la tierra. Una bodega en la que la sostenibilidad se transmite de principio al fin, desde un viñedo que apuesta por la biodiversidad y el mínimo intervencionismo, hasta un proyecto arquitectónico en armonía con el paisaje de su bodega. Todo el proceso de elaboración está pensado desde la búsqueda de la excelencia.
Al borde de un pinar
La finca, que ocupa 25 hectáreas entre viñedos y bosque de pinos, se ubica en la Ribera del Duero burgalesa, en el término municipal de La Horra, en el paraje de La Horca, al norte del camino de Anguix. La nueva bodega se ha construido al borde de un pinar, en la parte norte de la finca y ocupa 4.700 m2, que se destinan a la elaboración, la crianza en barrica y al botellero, así como a una zona de exposición y venta directa. Las naves existentes anteriormente sirven ahora como centro logístico y área de expedición.
La inversión total en la obra, instalaciones y equipamiento ha sido de 9,5 millones de euros. Bodegas La Horra refuerza su presencia en la Ribera del Duero y consolida su apuesta por la innovación respetuosa. Se posiciona así como referencia en la elaboración de vinos que son reflejo fiel de su territorio: Corimbo y Corimbo I, tintos de raíz ecológica, expresivos, frescos y profundamente ligados a su entorno.