Las celebraciones de la 51ª edición de los Premios Nacionales de Gastronomía culminaron con una gala llena de emoción, que incluyó una sorpresa final: el Premio Especial otorgado al Bar FM de Granada. Con un nuevo planteamiento y saliendo de Madrid por primera vez en 50 años, esta edición reafirma su voluntad de ser una institución abierta, plural y conectada con la realidad del sector.
La Real Academia de Gastronomía ha elegido Granada para acoger las celebraciones de la 51 edición de sus Premios Nacionales de Gastronomía. Una serie de eventos que culminaron con la ceremonia de entrega de los galardones en su Palacio el Congresos de la ciudad. Gastronomía y cultura se hermanaron en una noche emocionante que comenzó con la vibrante actuación del maestro de la guitarra Juan Habichuela Nieto y se cerró con el violinista Ángel Bocanegra, acompañado de Álvaro Martinete a la guitarra y Aroa Palomo al cante.
Se celebró el talento y la pasión de aquellos que constituyen la fortaleza de nuestra gastronomía, en su pluralidad de disciplinas y estilos. Como destacó ante el público Luis Suárez de Lezo, presidente de la Real Academia de Gastronomía, Paco Morales “y esa cocina que, bebiendo del pasado, demuestra que la historia también puede ser vanguardia”; Blas Benito y Raúl Rodríguez, “un ejemplo y escuela, reivindicación de valor del servicio como arte y expresión de hospitalidad”; Audrey Doré “con esa combinación brillante entre conocimiento y sensibilidad por el vino”; David de Jorge “por su inteligencia, humor y capacidad para acercar la gastronomía al gran público”; María Ángeles Pérez Samper, “valiente historiadora que se abrió camino defendiendo que la gastronomía también puede ser objeto de investigación”; Pilar Pascual, “ejemplo de una generación que se abre paso en un sector lleno de desafíos”; y Francisco López Canís, “quien desde los años setenta supo anticipar el papel crucial que jugaría la gastronomía en la identidad cultural del país”.
Un Premio Especial sorpresa
Los premiados ya se conocían, pero la noche tenía reservada una sorpresa, un Premio Especial, otorgado por la Junta Directiva, quien por unanimidad decidió reconocer la labor de Francisco Martín y Rosa Macías al frente de Bar FM de Granada. “Su búsqueda incansable por el mejor género de calidad, le ha convertido en uno de los grandes templos del producto de nuestro país”.
La gastronomía regional tuvo un gran protagonismo en la velada, ya que el cóctel de la gala estuvo servido por seis restauradores granadinos de reconocido prestigio: Antonio Lorenzo de El Conjuro, Chechu González, de María de la O, Ismael Delgado, de Portal bajo I, Lola Marín, de Damasqueros, Raúl Sierra, de Atelier Casa de Comidas y Samuel Hernández, de Cala. Fueron los encargados de escenificar con sus preparaciones la aspiración que recogió Luis Suárez de Lezo en su discurso: “Celebrar la diversidad de las identidades culinarias y poner en valor los productos, los paisajes y las tradiciones que construyen nuestra riqueza gastronómica”.
Con esta celebración, la Real Academia de Gastronomía hace realidad uno de los grandes retos de su renovada etapa: la transformación de los Premios Nacionales de Gastronomía, tanto en escenario como en planteamiento. “Desde Granada reafirmamos nuestra voluntad de ser una institución abierta, plural y conectada con la realidad del sector. Seguiremos trabajando para poner en valor la gastronomía española y proteger su legado”, apuntó el presidente de la institución en sus palabras.
Mesas redondas: un espacio para la reflexión
La ceremonia de entrega no fue el único evento de las celebraciones. Con el propósito de abrir un espacio al diálogo y la reflexión, durante la mañana se celebraron dos mesas redondas en el Palacio de los Córdova, donde se abordaron diferentes temas vinculados con la realidad del sector. La primera de ellas, bajo el título ‘Pasado, presente y futuro de nuestra gastronomía’, estuvo moderada por Ángel Parada, vicepresidente de la Real Academia de Gastronomía, y compuesta por Paco Morales, Premio Nacional de Gastronomía a Mejor Jefe de Cocina; el académico Borja Beneyto, Mikel Zeberio, Premio Nacional de Gastronomía a Mejor Comunicación; y la periodista Rosa Molinero. En la segunda se reflexionó sobre los retos y oportunidades del paisaje culinario local, moderada por José Manuel Gaztelu, presidente de la Academia Andaluza de Gastronomía y Turismo, y con la participación de Chechu González del restaurante granadino María de la O; Rosa Vañó, académica y productora (Castillo de Canena): José Ramón Calvo, Premio Nacional a Mejor Dirección de Sala; y Fernando Sáez, maestro heladero Prix au Chef Pâtissier de la Academia Internacional de Gastronomía.
Además, la noche anterior el Carmen de los Mártires fue el escenario de un acto especialmente significativo, en el que los miembros de la Real Academia de Gastronomía y una representación institucional recibieron a los premiados en una cena oficial ofrecida por Chechu González de María de la O.





