Ahora que se aproximan las celebraciones de Todos los Santos y Halloween, los huesos de Santo y los panellets están entre las diferentes formas con las que la empresa toledana Mazapanes Barroso elabora el mazapán de forma artesana con receta tradicional transmitida de generación en generación.
Los más tradicionales huesos de Santo son los de yema aunque también los elaboran con diferentes rellenos : chocolate, praliné de almendra, de avellana, fresa, cabello, batata, café, limón, naranja, coco, etc. Como otras variadas figuritas de mazapán de la casa, los huesos de Santo, están hechos mano de forma artesana.
Laboriosas piezas de mazapán
Son laboriosas piezas de mazapán apreciadas por su autenticidad y sus ricos sabores. Los huesos de Santo nacieron como “una variación del panellet. Se dieron por primera vez en Aragón, en una época en la que el catolicismo intentaba destacar lo incorrupto”. Ya en torno al siglo XVIII, vendrían las yemas y los sabores procedentes del Norte, las natas, y a partir de ellas, la crema y chocolate. Después han llegado la avellana, la frambuesa…”.
Una tradición de siglos, que fue reconocida con el Premio Nacional Carlos V a la Excelencia Empresarial, otorgado por la Sociedad Europea de Fomento, por la categoría Artesanía y Tradición, en reconocimiento a su trayectoria profesional y compromiso con la excelencia, entregado a José Barroso, maestro artesano y cuarta generación de Mazapanes Barroso.