| Con motivo del 50 aniversario de la muerte del artista malagueño, los chefs Iker González y Juanjo Solano han creado el “Menú Picasso”, una selección de platos que representan algunas de sus obras más importantes con guiños a la gastronomía. Este menú especial estará disponible desde el 18 de abril hasta final de mes y se completa con una propuesta de maridaje seleccionada exclusivamente para la ocasión. “Mira, allí, al sur, está Málaga”. Esta es la frase que Pablo Picasso repetía a menudo a su sobrino y que refleja a la perfección su amor por la tierra que lo vio nacer. A pesar de que sólo pasó en esta ciudad sus primeros diez años de vida, su personalidad quedó marcada por dichas raíces. Esta impronta dejó huella tanto en su vida como en su obra, en la que plasmó temáticas propias del estilo de vida mediterráneo, evocando en sus lienzos los sabores y tradiciones de Málaga. Ahora, con motivo del 50 aniversario de su fallecimiento, que se celebra este mes de abril, el restaurante Picador, desde su prestigiosa ubicación en el hotel La Zambra -el antiguo y afamado Byblos-, en Mijas, ofrece desde el 18 de abril hasta final de mes el “Menú Picasso”, una propuesta muy especial que rinde homenaje a la trayectoria del artista. Dando continuidad a la esencia culinaria de Picador, caracterizada por sus elaboraciones fieles a la cultura y tradición andaluzas, los chefs Iker González y Juanjo Solano han diseñado un menú compuesto por cinco platos que homenajean algunas de las obras del artista malagueño con guiños a la gastronomía y suponen, no sólo un viaje para el paladar, sino también por la vida y obra de Picasso. “La personalidad malagueña es uno de los pilares fundamentales de Picador. Por ello, en el aniversario de la muerte del artista, vimos la oportunidad perfecta para crear un menú que celebrase la cultura de esta región y homenajease a uno de los personajes más importantes de la misma”, explican los chefs. “Para dar forma al “Menú Picasso”, creamos un inventario de las obras del pintor y estudiamos sus costumbres y gustos de tal manera que pudiéramos crear platos en los que estuvieran presentes ingredientes o recetas que tuvieran un valor especial para él”, añaden. Obras de Picasso y platos En este particular homenaje a Picasso, se podrán degustar huevas de erizo con caldo de alitas fritas y aire de salicornia, que representan la obra Naturaleza muerta con cesta, tres erizos de mar y lámpara, realizada con carboncillo sobre lienzo en el año 1946; alcachofa frita con crema de foie y huevo a baja temperatura, en honor a la obra La mujer con alcachofa de 1941; y croquetas de choco sobre stencil del toro de Guernica, inspirado en el mítico cuadro de 1937. Esta elaboración establece una conexión entre la obra más popular de Picasso y el plato más característico de Picador, completada con una referencia directa a la misma a través del stencil del toro y el emplatado sobre un azulejo de diseño geométrico que recuerda a las formas típicas del cubismo. El menú continúa con arroz cremoso marino de bogavante y holandesa de limón encurtido, que está inspirado en el cuadro El bogavante de 1949. Y, como broche dulce final, chocolate en texturas y tabaco, un guiño al amor de Picasso por el chocolate y el tabaco. Para completar esta experiencia, el “Menú Picasso” cuenta con una propuesta de maridaje seleccionada exclusivamente para la ocasión. Un total de cinco referencias nacionales acompañan los platos mencionados anteriormente, siguiendo el mismo orden del menú: Gramona La Cuvée, espumoso de Corpinnat como aperitivo; blanco La Encina del Inglés, de la D.O. Sierras de Málaga; fino Eléctrico de Toro Albalá, un generoso Pedro Ximénez D.O. Montilla-Moriles; Finca La Cañada, un verdejo D.O. Montilla-Moriles; y para finalizar, BF Vino Maestro, moscatel dulce de la D.O. Málaga. |
ORIGEN, la revista
Acceso Biblioteca Origen Digital
