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Ribeiro: 90 años de la DO más antigua de Galicia

«El vino de Ribeiro es hermosura del románico rural», decía Álvaro Cunqueiro. Pocos vinos pueden expresar mejor el alma del terruño que estas joyas enológicas orensanas que se integran mágicamente en el  paisaje. Celebramos el 90 Aniversario de la DO más antigua de Galicia. 

           El 13 de septiembre de 1932, comenzaba la historia oficial de Ribeiro como Denominación de Origen. Han pasado ya, por lo tanto, más de 90 años desde que la Denominación de Origen Ribeiro apareciera, junto con otras 19 Denominaciones, en una publicación de la «Gaceta de Madrid», que reflejaba lo que poco más adelante vendría plasmado en el «Estatuto del Vino». Esa publicación del Estatuto del Vino fue elevada a Ley el 26 de mayo de 1933. Ya el 6 de diciembre de 1956 se constituyó el Consejo Regulador, siendo aprobado su primer Reglamento un año más tarde. Pero para conocer bien la historia tenemos que remontarnos mucho más atrás, puesto que las «Ordenanzas Municipales de Ribadavia» de 1579 ya determinaban los lugares y parroquias que podían producir y vender vino del Ribeiro, qué operaciones de manipulación estaban permitidas y qué sanciones tendrían quienes incumplieran dicha Ordenanza.

Mosaico de la diversidad

         La singularidad de esta histórica Denominación de Origen gallega se la dan unos vinos de paisaje y territorio tradicionalmente elaborados por sabias mezclas de variedades autóctonas, cada una de ellas aportando sus peculiaridades para obtener vinos auténticos y genuinos. Son vinos de marcados rasgos atlánticos, frescos, finos y elegantes, matizados por una suave influencia del clima mediterráneo. El característico factor de transición climática junto con las orientaciones y pendientes de la viña, la utilización y mezcla de variedades locales y el tipo de suelo, marcan el peculiar estilo Ribeiro. Además, la diferenciación de los tres valles (Avia, Miño y Arnoia) que componen la Denominación de Origen, situados en el borde noroccidental de la provincia de Ourense, convierten a Ribeiro en un mosaico de la diversidad.

Cinco categorías de vinos

          Los vinos de la D.O. Ribeiro se dividen en cinco categorías: Ribeiro Castes, Ribeiro Barrica, Ribeiro Espumoso, Tostado Ribeiro y Ribeiro.

           Los Ribeiro Castes, blancos y tintos, se diferencian de la categoría Ribeiro en que están elaborados 100% con variedades preferentes, es decir. Treixadura, Torrontés, Godello, Albariño, Loureira, Lado y Caíño blanco, entre las blancas; y Caíño longo, Caíño bravo, Caíño tinto, Ferrón, Sousón, Mencía y Brancellao, entre las tintas. Estos vinos son de más calidad y representativos de la Denominación, y están identificados en su etiqueta para que el consumidor pueda diferenciarlos. Al igual que las categorías Barrica, Espumoso y Tostado Ribeiro, que también son elaborados exclusivamente con uvas preferentes y pueden ser identificados en el etiquetado, presentación y publicidad por parte de la bodega. El 90% de la producción se concentra en los vinos blancos, los tintos representan el 9%, mientras que el Tostado y Espumoso apenas alcanzan el 1%.

         De producción mayoritaria, los vinos blancos están elaborados en su mayoría con la uva Treixadura acompañada con otras variedades en menor proporción. Suelen ser vinos jóvenes y con alto potencial de envejecimiento en botella. Destacan por su elegancia y sutileza, los aromas de frutas maduras y frutas frescas, notas florales, mieles, hierbas aromáticas y balsámicos. En boca son equilibrados, finos y delicados. Vinos armónicos, frescos, aromáticos y de buena persistencia. Son vinos gastronómicos y versátiles que evolucionan muy bien en botella. Junto a las citadas variedades preferentes, están también autorizadas para elaborar blancos la Albillo y la Palomino.

          Los vinos tintos del Ribeiro son auténticos, con carácter y genuinos, marcados por las uvas autóctonas. Se caracterizan por los aromas de frutas rojas y negras, notas florales de violetas, regaliz, especias y balsámicos. Tintos de buena carga tánica, carnosos, estructurados y con un punto de acidez que potencia su frescor y equilibrio. La Garnacha Tintorera y la Tempranillo son también variedades autorizadas por el Consejo Regulador.

La Treixadura, la uva reina

          Distinguida y armoniosa, la Treixadura es la uva blanca reina del viñedo del Ribeiro. Variedad de brotación y maduración tardía, y por lo tanto sensible a la altitud, su cultivo predomina en valles y laderas bien orientadas. Los vinos que produce son aromáticos, finos y elegantes, con recuerdos a frutas, delicadas notas florales y toques balsámicos.Se pueden encontrar monovarietales de Treixadura en Ribeiro aunque la mayoría son elaborados mezclados con otras variedades autóctonas, pero con predominio de la Treixadura. Así se consiguen vinos armónicos y equilibrados desde el viñedo, vinos diferentes, singulares y únicos.

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