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Cinco vinos de la DO Rueda para San Valentín

Llega el 14 de febrero y, como decía Lope de Vega: “Esto es amor, quien lo probó lo sabe”. ¿Qué mejor manera de celebrar el amor, sea cual sea, que compartir un vino de la D.O. Rueda? Como cada San Valentín, la Denominación de Origen Rueda, nos propone cinco ejemplos de vinos para degustar la esencia de un día muy especial. Uno de ellos (en la imagen) es Naiades Verdejo 2018.

Para aquellos noveles en el juego de Cupido, nos recomiendan Finca Montepedroso Verdejo 2022, de bodegas Finca Montepedroso. Es un vino criado sobre lías finas, que le aportan volumen y untuosidad en boca y mejoran su longevidad. De color amarillo limón con destellos verdes, en nariz es complejo, con recuerdos de albaricoque, cáscara de almendra verde y fondo anisado. También se pueden apreciar en él toques ahumados y notas minerales. Tiene una entrada en boca aterciopelada y sedosa, con una sensación de frescura e intenso recuerdo de hinojo.

Para los enamorados veteranos, devotos que renuevan una vez más su compromiso con la emoción del primer momento, la propuesta es el vino Castelo de Medina Verdejo Fermentado en barrica 2021, de Castelo de Medina. Calificado como “Gran Vino de Rueda”, esta categoría indica que procede de viñedos de más de 30 años y de bajo rendimiento. Tiene un color amarillo pajizo con tonos verdosos y destacan sus aromas de hierba recién cortada, anisados y de frutas blancas. La fermentación en barricas de roble francés aporta untuosidad y complejidad a la variedad verdejo.

Para los aventureros que justo en esta fecha tan señalada deciden iniciar la gran travesía del amor, nos recomiendan el vino Martivillí Verdejo 2022, de Bodegas y Viñedos Ángel Lorenzo Cachazo. Presenta un color amarillo con destellos verdosos, muy brillantes. Las uvas de verdejo con las que se elabora se encuentran en viñedos a más de 800 metros de altitud sobre el nivel del mar, plantadas sobre suelos ricos en calcio y magnesio, que generan aromas a fruta madura y flores blancas. Un vino fácil de beber y con un final refrescante.

Para los amantes del amor, pero no del compromiso, aquellos que buscan la espontaneidad del momento fugaz, la propuesta es Blume Verdejo Selección 2022, de Pagos de Rey.  Vendimiado de noche para conservar el carácter aromático y macerado con las pieles a baja temperatura. Su color es amarillo pálido, con reflejos dorados y una gran complejidad de aromas de frutas cítricas como la mandarina y la naranja, además de sutiles notas de eneldo. Un cuidadoso tratamiento de la uva verdejo, la variedad estrella en esta región, junto con las técnicas de vinificación más modernas, dan como resultado un vino blanco seco, fresco y con la acidez bien integrada.

Para los que dedican su tiempo al amor propio, sanador, completo de autoestima, orgullo y validación, la propuesta es Naiades Verdejo 2018, de Bodegas Naia, (dato importante: las Naiades son, según la mitología griega, ninfas del agua con el don de la curación y la profecía). Este vino procede de viñas viejas de hasta 120 años, de diferentes terroir de la D.O. Rueda. De color amarillo con matices dorados, en nariz es muy elegante, mezclando aromas de fruta de hueso y especiados. Fermentado en barrica y en contacto con las lías, es un vino elegante, expresivo, fresco y mineral. Con una excelente densidad en boca y una expresión muy sincera de la fruta.

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