El casi recién llegado a La Latina, uno de los últimos estrenos de este referente del ramen en Madrid, luce ya con la estética y el nuevo logotipo que integra un bol, unos palillos, herramientas simples pero fundamentales para disfrutar de esta contundente sopa, que reflejan el verdadero espíritu street food de este restaurante especializado. En cuanto a la apariencia del local, imperan la madera y la piedra, que le aportan el aire rústico y artesanal de las izakayas, en contraste con neones, banderolas y un enorme mural manga que trasladan al Japón más transgresor.
En plena temporada de abrigo y sopas, nada apetece más que un ramen, que además de calentar el cuerpo, cunde como la comida completa que es, con pasta, carne, verduras y huevo incluidos. Y aunque apetezcan todo el año por su intenso sabor, esta es la mejor época para acercarse y así descubrir la nueva estética de Ramen Shifu, asentada en el recién estrenado local de La Latina (Toledo, 24. Tel. 91 058 18 54. Madrid / Ayala, 65. Tel. 91 401 77 30 / Zurbano, 67. Tel. 91 058 18 59. www.ramenshifu.com). Un año después de su primera apertura en el Barrio de Salamanca, la marca del ramen del Grupo Ayala Japón ha encontrado una imagen que representa fielmente su esencia sin demasiados adornos. Al anterior logotipo, que además del nombre en caracteres latinos incorporaba la transcripción en chino, se le ha cambiado la tipografía para emular las tiras de los noodles, absolutos protagonistas del plato. Unos palillos sobre estas letras y un bol bajo ellas, completan una sencilla y actual imagen que transmite la idea de artesanía, tradición y conocimiento del producto que también buscan con sus platos sin dejar de lado ese toque de modernidad.
La estética del local también está en perfecta sintonía con estos cambios, ya que predominan materiales rústicos como la piedra vista o láminas de madera en las paredes, así como elementos de cerámica o mimbre para decorar e iluminar, como las lámparas con enrejados o simulando nasas de pesca. El contraste lo ponen los neones y el gran mural manga de un samurai que destaca en el salón, fiel todo ello al auténtico espíritu street food del que son típicas estas sopas orientales.
La barra, con sillas y taburetes bajos, está inspirada en las tabernas o izakayas japonesas pero con un toque más actual mezclando la fina cerámica de la vajilla con banderolas y cartelería de noodles. En definitiva, un conjunto que transporta a las raíces de esta cocina tradicional, adaptado al estilo de nuestros días para seguir creando legión de los #MuyFandelRamen.
A pesar de distinguirse estéticamente de las otras dos direcciones, la oferta gastronómica es la misma que en Zurbano y Ayala: más de 10 ramen diferentes, con opciones vegetarianas y picantes para los valientes, así como las más típicas con carne de cerdo como el Tonkotsu o el elaborado con base de Miso. También tienen baos y menú del día de lunes a viernes que incluye una ración de 100 gr de algunos de sus ramen o del Arroz mandarín, bebida, y uno de sus entrantes estrella: las gyozas.