Llamamiento urgente de las principales asociaciones vitivinícolas europeas

Los sectores vitivinícolas español, francés e italiano consideran que la diplomacia, la PAC y el presupuesto específico de la Unión Europea son cada vez más vitales para garantizar el futuro del sector.

Los días 10 y 11 de junio, Montepulciano (Italia) se convirtió en la capital europea del vino al acoger la reunión anual de las asociaciones nacionales de España, Francia e Italia. La reunión, oficialmente denominada “Grupo de Contacto”, es un punto de diálogo en el que las asociaciones nacionales que representan al sector se reúnen y debaten, en presencia de sus respectivas administraciones nacionales, para alcanzar posiciones comunes sobre los principales temas de interés para el sector vitivinícola.

Llegar lo antes posible a un acuerdo

En la reunión de Montepulciano, las asociaciones lanzaron al unísono un llamamiento urgente a las instituciones europeas y a sus respectivos gobiernos para que se esfuercen con determinación por apoyar el diálogo multilateral con las autoridades estadounidenses y llegar lo antes posible a un acuerdo “cero por cero”, garantizando finalmente la estabilidad a las empresas.

El futuro del sector está cada vez más afectado por los aranceles de EEUU, las tensiones con China, la bajada de consumo y la tragedia de las guerras. El presupuesto específico de la UE y la diplomacia son vitales para garantizar el futuro económico, social y medioambiental del sector.

«Paquete vino»

También por esta razón, las asociaciones siguen de cerca las próximas citas en la agenda de Bruselas, desde las conversaciones en curso sobre el llamado “paquete vino” hasta la negociación que se iniciará en unas semanas entre los jefes de Estado y de Gobierno sobre el presupuesto de la UE a partir de 2027. “El “paquete vino” es una primera respuesta oportuna que acogemos con satisfacción, pero ahora más que nunca no debe ponerse en tela de juicio el apoyo de la UE al sector, que debe disponer de los recursos adecuados sin los cuales no puede existir una política vitivinícola europea a la altura de los retos a los que se enfrentan los viticultores europeos. En particular, el presupuesto de la futura PAC debe proteger los programas vitivinícolas nacionales, y el «paquete vino» debe ofrecer oportunidades de apoyo a las empresas vitivinícolas que también sufren la crisis del consumo y de aranceles.

Por otro lado, se reivindica el vino como un producto compatible con un estilo de vida saludable, y se muestra confianza en que la UE, ante la próxima reunión de Naciones Unidas prevista para septiembre, garantice que la declaración política sobre enfermedades no transmisibles que se adoptará no resulte lesiva para la viabilidad económica y social del sector. Estas fueron las conclusiones de los dos días pasados en las colinas toscanas.

Los participantes

Las asociaciones participantes en esta reunión fueron:

-Por España, Asociación Empresarial Vinos de España (AEVE), Asociación de Jóvenes Agricultores (ASAJA), Cooperativas Agro-Alimentarias de España, Conferencia Española de Consejos Reguladores Vitivinícolas (CECRV), Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Federación Española del Vino (FEV), Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE) y la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA)

-Por Francia, Asociación FNSEA – Commission Viticole, La Coopération agricole – Vignerons coopérateurs de France (VCF), Vignerons indépendants de France; Les vins IGP de France (VINIGP).

-Por Italia, Alleanza delle Cooperative Italiane Agroalimentari, Assoenologi, CIA – Agricoltori Italiani, Coldiretti, Confagricoltura, Copagri, Federdoc, Federvini, FIVI e Unione Italiana Vini;