La parrilla japonesa premium Yakimanzi (Río Tormes, 13. Fuenlabrada. Madrid) es una experiencia culinaria única que se distingue por la calidad excepcional de sus ingredientes y su experta técnica de preparación. Lonchas de wagyu, lengua de angus, entrecot, secreto, panceta, lágrima, lonchas de ternera, costilla de res, dados de ternera, lomo, falda, espaldilla… Los mejores cortes de carne, pero también mariscos como carabineros, gamba roja, langostinos, gamba blanca…
En el centro de su amplia y exquisita oferta gastronómica se encuentra la aclamada carne de wagyu con clasificación A5, el nivel más alto y prestigioso de esta famosa carne japonesa, conocida por su sabor incomparable y su textura melt-in-the-mouth.
El wagyu es una de las carnes más codiciadas y lujosas del mundo, y la clasificación A5 es la más alta que concede la JMGA (Japan Meat Granding Association). Este grado se otorga solo a la carne que cumple con los estándares más estrictos de calidad en cuanto a su marmoleo, color, textura y sabor. El marmoleo se refiere a la distribución de la grasa intramuscular que, en el caso del A5, es excepcionalmente denso y fino. Esta grasa no solo es estéticamente impresionante, sino que también es la responsable de la suavidad y el sabor tan característico y apreciado del wagyu.
Yakimanzi lleva su carne de wagyu A5 a otro nivel al utilizar brasas de calidad, lo que potencia aún más sus elevadas propiedades. La cocción a la brasa, realizada con esmero, permite que la carne se cocine lentamente, preservando toda su jugosidad y suavidad, mientras se sella el sabor y se crea una deliciosa capa exterior caramelizada que contrasta perfectamente con la ternura interna.
La técnica de barbacoa a la brasa es fundamental para realzar el sabor natural del wagyu A5. En Yakimanzi, el proceso de preparación se lleva a cabo sobre brasas de alta calidad en parrillas de carbón que pueden alcanzar hasta 900 grados que permiten dorar la superficie de la carne en solo dos o tres chisporroteantes segundos a la temperatura perfecta para sellar sus jugos sin sobrecocinarla. Todo un ritual para asegurar una explosión de sabor, con la carne deshaciéndose en la boca y dejando una sensación de satisfacción inigualable.
El resultado es una carne que no solo es tierna, sino que se caracteriza por su sabor profundo y umami, su textura se deshace con facilidad, y su grasa, de sabor suave y delicado, se fusiona de manera perfecta con el resto de la carne. Cada bocado es una experiencia sensorial que resalta la calidad inigualable de este corte exclusivo.
La parrilla japonesa Yakimanzi es un homenaje al arte de la parrilla y a la calidad sin igual. Es un lugar ideal para los amantes de la carne que buscan una experiencia gastronómica única e inmersiva, donde el ritual, el sabor, la textura y la presentación se combinan de manera perfecta con el ambiente tradicional japonés tanto en sala como en sus salas privadas para grupos y eventos destinadas a una celebración más íntima.
Una experiencia que va más allá de lo común. La calidad excepcional del wagyu, combinada con el toque artesanal de la barbacoa a la brasa, hace que cada bocado sea una verdadera delicia para los que disfrutan de una experiencia gastronómica de lujo y una carne de sabor incomparable, la barbacoa a la brasa Yakimanzi es la opción perfecta.
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