Aunque la composición exacta del menú puede cambiar en función de la disponibilidad en el mercado, este está compuesto por Puré de patatas con foie y setas de cardo, Boletus con aceite de oliva y vino de Oporto, Hamburguesa de setas del bosque, Ravioli de trompetas negras con crema de azafrán y jengibre, Lomo de bacalao con mahonesa de setas y Tataki de solomillo ibérico con boletus badius. Para terminar, un postre clásico de Sorbete de limón al cava.
El precio de este menú es de 40 € por persona, y no incluye bebidas. El equipo de Bolívar asesora a los clientes las mejores opciones de su carta de vinos para acompañar la propuesta.
Abierto en 1972 como casa de comidas, Bolívar ha sido testigo de los cambios en el barrio, la ciudad de Madrid y sus gentes y, también, de la evolución de la gastronomía y los gustos en la capital. Aunque la carta cambia constantemente en función del mercado, hay platos que son fijos o, incluso, clásicos como las Croquetas caseras de langostinos, las Verdinas con almejas que Concha elabora a fuego lento en temporada o el Taco de atún rojo con pimientos asados y jamón frito.
La sala, reformada hace siete años, es un pequeño espacio con predominio absoluto del blanco con el que se busca ofrecer un ambiente cálido y distendido. Con una decoración minimalista y luces suaves, el local se presenta como el escenario ideal tanto para veladas románticas como para reuniones empresariales.
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